El silencio, muchas veces, se convierte en una barrera que impide reconocer el dolor, pedir ayuda o tender una mano. Con demasiada frecuencia, lo que no se nombra se mantiene oculto, reforzando el estigma y debilitando los lazos de cuidado que necesitamos como comunidad.

El conversatorio “Más allá del silencio” es una invitación a mirar de frente esas realidades que se suelen callar, a crear un espacio de escucha respetuosa y a comprender que cada voz, cada gesto y cada palabra de apoyo tienen la capacidad de transformar vidas.

Hablar no es solo un acto de valentía: es también un acto de amor, de cuidado y de responsabilidad compartida. Porque romper el silencio abre caminos de esperanza y recordarnos que nunca estamos solos puede marcar la diferencia entre la desesperanza y la vida.

#prevenciondelsuicidio